Muchos
entrenadores piensan que es un atributo el ser apreciado por sus deportistas, pero
probablemente preferirían ser respetados. Con frecuencia es difícil saber si
son o no respetados, pues éste se recibe de forma indirecta más que directa; manifestándose
en la ausencia de comportamientos adversos y/o problemas en el grupo.
Los deportistas
que respetan al entrenador, por lo general quebrantan poco las reglas, se da
menos ausentismo, peleas, signos de discrepancias e inexistente socavamiento de
la autoridad (señales de falsedad o desprestigio); y si ocurriera, los otros
miembros del grupo se apresuran a recordarle al infractor que está equivocado.
No se puede
estar seguro de la cantidad o grado de respeto que cada deportista profesa; solo
tiene su comportamiento para intentar ganar y mantener el respeto. Existen muchas
razones que generan respeto hacia un Coach, por ejemplo:
- CONOCIMIENTO.
Saber que es un experto y que tiene un amplio conocimiento de su deporte y que
en un punto crítico sea capaz de aportar una solución.
- INTERÉS.
Al deportista le interesa creer que el entrenador está interesado en él como
persona (bienestar) y no solo como un sujeto con talento.
- IMPARCIALIDAD.
Igualdad de oportunidad para demostrar el talento y que no será ignorado si su
actuación no es destacada.
- MODELO.
Adherido a las reglas y regulaciones tanto o igual como los deportistas. Romper
sus propias reglas vulnera el respeto.
- MADUREZ. Símbolo de madurez y ejemplo
a seguir. Ha de cuidar la repercusión de sus actitudes y palabras.
Mg. Franz RIvera Mansilla
Psicólogo Del Deporte